Escasa la participación que hemos tenido hoy. Hemos salido solo tres componentes del club y nos ha acompañado Lutgardo G.
Previendo el calor que, como después comprobamos, podría hacer, salimos temprano de Bellavista.
Tomamos la pasarela que atraviesa la marisma y nos adentramos por un enorme pinar, por el que transcurrió casi toda la jornada. Es un lugar precioso, que lamento no haber podido hacerlo un mes atrás.
El recorrido es bastante exigente, con continuas subidas y bajadas. Muy sinuoso y que unido a las raíces de los pinos, tocones y arena, hace que no perdamos ni un momento la concentración. En algunos tramos, el monte casi cerraba el sendero, lo que daba una mayor dificultad a la ruta. Ciclismo todo terreno en estado puro.
Mediada la etapa, aproximadamente, paramos en El Rompido para tomar café. Desde aquí enfilamos hacia El Portil. La intención era hacer algunos kilómetros por la costa. Tal era la cantidad de gente en la playa, que desistimos y nos volvimos a internar en el pinar, para no dejarlo más hasta llegar nuevamente a la pasarela, por donde entramos nuevamente en Bellavista.